¡Labios suaves y relucientes!
Cómo tener unos labios más suaves
¿A quién no le gustaría lucir unos labios irresistibles como los de las actrices del cine?
Si, por el contrario, los tuyos están agrietados, resecos y con piel desprendida te aconsejamos que emplees algunas de las siguientes recetas y consejos:
1. Usa labial hidratante
Se consiguen en las farmacias, perfumerías (y tiendas similares) y contienen ingredientes muy buenos para reducir la sequedad como, por ejemplo, aceites esenciales o vaselina.
Un buen bálsamo para labios aportará vitamina E, que se traduce en piel suave y saludable.
- Recuerda usar este producto tanto en invierno como en verano.
- Para los días calurosos te recomendamos además que el hidratante contenga al menos 15 de factor de protección.
- Aplica varias veces al día antes de usar tu labial favorito e incluso cuando te acuestas por las noches.
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2. Bebe mucha agua
Si quieres tener unos labios suaves es fundamental que se mantengan humectados. Además de los labiales externos deberás hidratar el cuerpo “por dentro”. Y, para ello, no hay nada mejor que beber una buena cantidad de agua a diario.
Seguro sabrás que lo recomendable son 8 vasos (2 litros) y que, además, puedes incluir infusiones de hierbas y zumos naturales para no aburrirte y cumplir con la dosis aconsejada.
3. Exfolia
Quizás te parezca algo extraño leer que debes exfoliar tus labios si están resecos porque consideras que se irritarán aún más.
Sin embargo, este tratamiento sirve para quitar las células muertas acumuladas y permitir una recuperación completa de la piel.
Eso sí, los movimientos deben ser suaves para no lastimar la tan delicada zona.
Existen diferentes recetas de exfoliantes caseros para labios. Puedes aplicarlos con ayuda de un cepillo de dientes, y no te olvides de colocar crema humectante al finalizar. Exfolia una vez a la semana.
Exfoliante de azúcar y miel para labios
Es la receta más eficaz si deseas una sonrisa sensual y suave. Ambos ingredientes eliminan la piel reseca y que sobresale de tus labios.
Te recomendamos que la miel sea del tipo azucarado, porque la versión más líquida no exfolia. Puedes reemplazar la miel con vaselina.
Ingredientes
- 1 cucharada de azúcar (10 g)
- 1 cucharada de miel (25 g)
Preparación
- En un recipiente coloca el azúcar y la miel.
- Mezcla bien y usa un cepillo de dientes para aplicarla.
- Coloca en los labios y, con movimientos circulares suaves, masajea la piel por completo.
- Enjuaga con agua tibia.
Exfoliante de coco para labios
El coco rallado actúa como un potente removedor de impurezas y no es tan abrasivo como el azúcar. Puedes comenzar con este tratamiento si los labios están muy lastimados.
Ingredientes
- 1 cucharada de coco rallado (10 g)
- 1 cucharadita de agua (5 ml)
Preparación
- Mezcla el agua con el coco rallado y forma una pasta.
- Aplica sobre los labios y frota con movimientos circulares (puede ser con los dedos o con un cepillo de dientes).
4. No comas alimentos salados
Aunque no lo creas, los aperitivos o comidas muy saladas son malos para la salud de tus labios.
Esto se debe a que la sal se queda “pegada” en la piel y absorbe el poco agua que se ha almacenado cuando están resecos.
- Si no puedes evitar comer patatas fritas, trata de enjuagarte bien la boca al terminar.
5. Protégelos del clima
En invierno debemos tener mucho cuidado del viento, las bajas temperaturas y hasta de la nieve. Todos estos elementos pueden dañar la piel de los labios.
- Te aconsejamos que lleves una bufanda que tape la boca.
En cambio, durante el verano el mayor enemigo de esta sensible zona, sin dudas, es el sol.
- Además de aplicar factor de protección en la piel tendrás que usar labiales especiales y en lo posible no salir en las horas del mediodía. Si lo haces usa un sombrero.
6. No te lamas o muerdas
Son hábitos irracionales que pueden dañar mucho los labios.
- En primer lugar, si los estás lamiendo constantemente, la saliva resecará el área y además eliminará la capa de bálsamo natural que la protege.
Quedan también descartados los labiales con sabores, ya que incitan a lamernos.
- Tampoco es bueno que muerdas los labios, porque la presión de los dientes daña la tan delicada piel.
- Te aconsejamos además que no la pellizques cuando aparecen estas “telas” o descamación, ya que ralentizarás el proceso de cicatrización, podrás provocar sangrado y mayor irritación.
7. Humecta con aceites
Si no quieres usar labiales comprados en una tienda no hay problema, porque puedes recurrir a los aceites y disfrutar de todas sus bondades hidratantes.
Por ejemplo los de oliva o almendras son recomendables y muy fáciles de conseguir.
- Aplica algunas gotas en la piel y deja que se absorba por completo.
- Puedes aprovechar cuando estás en casa mirando televisión o leyendo para realizar este tratamiento. Mejor si lo repites varias veces al día.
- Crearás una capa protectora contra el sol y el clima mientras humectas los labios y les aportas brillo.
Recuerda, si ves alguna herida en el labio que no cicatriza o alguna otra señal que pueda alarmarte, visita a tu médico para que lo valore.
Con estos consejos conseguirás unos labios más suaves durante todo el año. ¿Te animas a probarlos?
les servirá de mucha ayuda
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